CIRUGÍA
La infección reciente o actual por COVID-19 está relacionada con un mayor riesgo de coágulos durante la cirugía
Eurekalert · 30 agosto 2021
El tromboembolismo venoso se asocia posteriormente a un riesgo 5 veces mayor de muerte en 30 días, según un nuevo estudio de la colaboración GlobalSurg-COVIDSurg.
Una nueva investigación publicada en Anaesthesia muestra que el tromboembolismo venoso (TEV) tiene 50 por ciento más probabilidades de producirse en pacientes con infección actual por COVID-19 y casi el doble en aquellos con infección reciente. El estudio también descubrió que tener un TEV se asocia a un riesgo 5 veces mayor de muerte en los 30 días siguientes a la cirugía, en comparación con los pacientes sin TEV.
El estudio fue realizado por la colaboración GlobalSurg-COVIDSurg, dirigida por la Universidad de Birmingham (Reino Unido), una colaboración mundial de más de 15.000 cirujanos que trabajan juntos para recopilar datos sobre la pandemia COVID-19. La colaboración ya ha producido varios estudios, y este nuevo análisis incluyó 128.013 pacientes, procedentes de 1.630 hospitales de 115 países.
Se clasificó a los pacientes con ETV (embolia pulmonar o trombosis venosa profunda) en los 30 días siguientes a la intervención quirúrgica. El diagnóstico de ETV-CoV-2 se definió como perioperativo (entre 7 días antes y 30 días después de la cirugía), reciente (entre 1 y 6 semanas antes de la cirugía), anterior (7 semanas o más antes de la cirugía), o sin diagnóstico pasado o presente.
La tasa de TEV postoperatoria fue del 0,5 por ciento (666/123.591) en pacientes sin SRAS-CoV-2; del 2,2 por ciento (50/2.317) en pacientes con SRAS-CoV-2 perioperatorio; del 1,6 por ciento (15/953) en pacientes con SRAS-CoV-2 reciente; y del 1,0 por ciento (11/1.148) en pacientes con SRAS-CoV-2 anterior.
Tras el ajuste por factores de confusión, los pacientes con SARS-CoV-2 perioperatorio presentaron 50 por ciento más de riesgo de TEV y los que tenían SARS-CoV-2 reciente, 90 por ciento más riesgo. Los pacientes con SARS-CoV-2 anterior tenían 70 por ciento más riesgo de TEV, pero este resultado tuvo una significación estadística límite.
En general, el TEV se asoció de forma independiente a la mortalidad a los 30 días, aumentando el riesgo de muerte durante este periodo en 5,4 veces. En los pacientes con SARS-CoV-2, la mortalidad sin TEV fue del 7,4 por ciento (319/4.342) y con TEV fue de nuevo más de 5 veces superior: un 40,8 por ciento (31/76).
Los autores señalan una importante limitación del estudio: que no se disponía de información sobre los regímenes de profilaxis de los coágulos sanguíneos venosos ni sobre la anticoagulación preoperatoria para prevenirlos, y afirman que "es necesario seguir investigando para definir los protocolos óptimos de prevención y tratamiento de la TEV en pacientes quirúrgicos en el contexto de la infección por el SRAS-CoV-2".
La coautora, Elizabeth Li, comenta que "las personas que se someten a una cirugía ya tienen un mayor riesgo de TEV que el público en general, pero descubrimos que una infección actual o reciente por el SARS-CoV-2 se asociaba a un mayor riesgo de TEV postoperatoria. Los pacientes quirúrgicos tienen factores de riesgo de TEV, como la inmovilidad, las heridas quirúrgicas y la inflamación sistemática, y la adición de la infección por SARS-CoV-2 puede aumentar aún más este riesgo".
Según el cirujano Aneel Bhangu, "debería tenerse en cuenta una mayor concienciación y vigilancia. Como mínimo, sugerimos que se siga de cerca la profilaxis estándar del TEV en los pacientes quirúrgicos, incluido el uso de medicación anticoagulante cuando el riesgo de hemorragia sea mínimo, y que se aumente la vigilancia y las pruebas de diagnóstico en los pacientes que presenten signos de TEV, como hinchazón en una pantorrilla, dolor torácico en el lado derecho y dificultad para respirar".
"La atención postoperatoria rutinaria de los pacientes quirúrgicos debería incluir intervenciones para reducir el riesgo de TEV en general –concluyen los autores-, y se necesita más investigación para definir los mejores protocolos de prevención y tratamiento de la TEV en este entorno".
Referencia: Anaesthesia. 2021;10.1111/anae.15563. doi:10.1111/anae.15563