PROFESIÓN MÉDICA
JANO.es · 15 diciembre 2010
La organización presentó ante su Asamblea General un documento para definir la validación periódica de la colegiación.
La Organización Médica Colegial (OMC) contará para el próximo año con un presupuesto de 8.874.000 euros, de los cuales el 50% se devuelve a los colegios de médicos y consejos autonómicos, según lo respaldó la Asamblea General en la reunión mantenida el pasado fin de semana en Madrid.
El equilibro entre gastos e ingresos se ha conseguido a través de medidas y ajustes restrictivos, ajustados al incremento del IPC y la subida del IVA, adaptados a los movimientos realizados durante el año anterior.
De las partidas que han experimentado un crecimiento destacan las de organismos internacionales, con el objetivo de ajustarse a la mayor presencia de la institución en el ámbito internacional. Asimismo, crecen los presupuestos para servicios externos para la implementación de los requisitos exigidos en la ley ómnibus y la ventanilla única.
Del mismo modo, y con el objetivo de una mayor profesionalización de la institución, se incorpora una nueva partida para el desarrollo del Plan Estratégico 2011, aprobado recientemente por la Asamblea General de la OMC.
Por otro lado, en un punto extraordinario en el orden del día de dicha asamblea se anunció un nuevo documento sobre la Validación Periódica de la Colegiación (VPC), con el objetivo de que sirva de vehículo para demostrar cómo se hace efectivo el compromiso de la profesión médica con la sociedad.
El documento incluye de "una manera clara y rigurosa" la definición de VPC que, según apuntan, "no es más que rendir cuentas y dar un paso más en lo que es ordenar y controlar el ejercicio de la profesión médica".
Del mismo modo, también se informó sobre los procedimientos que se van a emplear para su realización, ya que la finalidad de la VPC se mide a través de tres parámetros: garantizar a la sociedad, y al paciente en particular, que los médicos que voluntariamente la obtengan reúnen unos estándares determinados para crecer como tales; garantizar a los médicos que ejercen como tales, y que se comprometan con este proceso, que sus actos profesionales están avalados; y que los organismos correguladores de la profesión médica puedan rendir cuentas en todo momento a la sociedad sobre la calidad de los actos médicos.
Certificado de buena praxis
El procedimiento conlleva certificado de buena praxis, actitud psicofísica, y certificado de vida laboral, las tres condiciones básicas a las que se podría incorporar, voluntariamente, la actividad formativa continuada y de desarrollo profesional, docencia e investigación realizada durante un período de seis años.
Como primer paso de la puesta en marcha de este proyecto pionero, está previsto realizar un amplio pilotaje en el que intervendrán 15 Colegios de Médicos, que va a resultar muy valioso para conocer a fondo la manera más adecuada de cómo se ha de llevar a cabo el proceso.
Desde la OMC se considera, por otra parte, "esencial" que la VPC sea admitida desde el principio tanto por la profesión médica y por la sociedad en general así como por la Administración, en particular, siendo necesario que ésta verifique su eficacia y sus plenas garantías y que entienda que no sería lícito que ella misma se encargara de este procedimiento, dado que "lo político nunca puede intervenir con justicia en un órgano regulador que afecte a la profesión médica, ya que el interés político primaría en cada caso".