De enero a julio de 2008 se han registrado en Estados Unidos un total de 131 casos de sarampión, el número más alto en el mismo periodo de siete meses desde 1996, según un informe del Centro Nacional de Inmunización y Enfermedades Respiratorias (NCIRD), en el que también se destaca que casi la mitad de los casos fueron pacientes no vacunados debido a las creencias religiosas o filosóficas de sus padres.

 

Aunque no se han registrado muertes por este motivo, al menos 15 pacientes, la mayoría niños, requirieron hospitalización, según se recoge en “Morbidity and Mortality Weekly Report”. De los 131 casos, 112 fueron personas no vacunadas o sin constancia de su estatus de vacunación y 65 no fueron vacunados debido a creencias religiosas o filosóficas.

 

Los estados con mayor número de casos registrados fueron Illinois (32), Nueva York (27) y Washington (19). Diecisiete casos contrajeron el sarampión en otros países y otros 99 están relacionados con sarampión importado. El informe aclara que el incremento detectado este año no es el resultado de un gran número de casos importados, sino de la transmisión viral tras la importación a estados Unidos, especialmente entre niños de edad escolar.