POLÍTICA SANITARIA
JANO.es · 19 marzo 2012
El texto considera que esta tasa debería entenderse como un "experimento" sometido a un "control exhaustivo" de las variables para "poder detectar fehacientemente sus efectos".
Un informe elaborado por un grupo de trabajo de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC), entidad que engloba a 20.000 médicos españoles, señala que "no existen pruebas concluyentes de los beneficios del copago", pero sí hay "evidencias, aunque sean débiles, y derivadas de múltiples estudios, sobre sus posibles efectos perjudiciales en la equidad y la salud de la población, especialmente la más desfavorecida socioculturalmente".
Este trabajo, que lleva por título 'Copago. Conclusiones desde la evidencia científica', ha sido coordinado por Pascual Solanas y, en el mismo, han trabajado seis expertos de las secciones de Madrid, Cataluña, Aragón, Galicia y Las Baleares de esta sociedad médica.
El documento aboga por un incremento de los impuestos directos relativos a la renta, patrimonio y sucesiones; los impuestos indirectos sobre el IVA; los impuestos indirectos sobre el tabaco y el alcohol, y la contención, racionalización y reducción del gasto vía catálogo de prestaciones, transferencia de riesgos a los proveedores y mejora de la organización sanitaria.
En caso de aplicación de copagos, el informe de la semFYC considera que esta tasa debería entenderse como un "experimento científico", con un "control exhaustivo" de las variables para "poder detectar fehacientemente sus efectos". Del mismo modo, los autores se muestran partidarios de que el precio de los medicamentos tenga en cuenta la renta de los ciudadanos.
Este análisis de la semFYC también respasa otros estudios y monografías de ámbito europeo que han ahondado en los últimos años en el copago, como el 'Health Evidence Network' (HEN), publicado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en junio de 2004, o 'Corresponsabilidad individual en la financiación pública de la atención sanitaria', elaborado por diferentes economistas de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona y publicado en septiembre de 2006 por la Fundación Rafael Campalans.
Disuasión de ancianos
En Suecia, al excluir a los niños y adolescentes del copago, aumentó la frecuentación. Además, en ese país la disminución del precio por visita en primaria y el aumento en la consulta externa hospitalaria provocó un 1% de aumento en atención primaria y una disminución del 9% en las consultas externas hospitalarias (CEH).
En dos estudios en los Países Bajos, se puso de manifiesto que el copago en hospitales y primaria no modificó el uso de estos servicios, y en Francia, el copago del 10% no modificó las visitas, aunque sí la atención a domicilio, que fue más cara.
En Finlandia, el copago disminuyó las visitas en traumatología pediátrica entre un 18 y un 27%, según el tramo de edad. Por su parte, en Dinamarca el copago disminuyó los exámenes preventivos para enfermedad cardiovascular de un 66% (sin copago) a un 37% (con copago), y disuadió a los ancianos de la vacunación antigripal.